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viernes, 6 de junio de 2008

L´angle du Cinéaste: A Guide to Recognizing Your Saints


Tus Santos y Tus Demonios
(A Guide to Recognizing Your Saints)
Dito Montiel, 2006

Acudí este jueves al cine ya que tenía muchas ganas de ver esta película, antes de que saliera de cartelera luego de solamente dos semanas de exhibición. Que durara tan poco en los cines me parecía raro, ya que el casting es de lo mejor: Robert Downey Jr., Chazz Palminteri, Diane Wiest y Shia LaBeouf. Pero ahora que la he visto, me queda clarísimo que la única persona que realmente puede disfrutar viendo esta película y entender todo lo que quiere decir, es su director y escritor, Dito Montiel.

Mr. Montiel escribó hace unos años el libro “A Guide to Recognizing Your Saints”, una especie de autobiografía / memorias. Resulta que al libro le fue muy bien y entonces Mr. Montiel decidió que si había sido buen escritor, también podría ser buen guionista. Luego de terminar el guión para llevar su libro a la pantalla, decidió ser él mismo el director del filme. Y sí, no dudo que debe ser muy emocionante hacer un libro y una película autobiográfica, pero si vas a hacerlo, lo primero que debe buscarse es que la problemática planteada en la cinta sea de interés para el espectador. Tu historia de vida puede ser interesantísima para ti, porque tú viviste los problemas y tú sabes cómo le hiciste para salir adelante, pero problemas los tenemos todos, y si no construyes la historia de una forma en que hagas que el espectador se identifique contigo y tu problemática, no va a ser fácil que la película llegue al público y logre conmoverlos.

La cinta nos cuenta la historia de Dito Montiel en dos momentos de su vida: durante su juventud (Shia LaBeouf) y cuando decide volver y enfrentar su pasado (Robert Downey Jr.). Dito vive con sus padres en Nueva York en los años 80. Tiene varios amigos, una novia a la que quiere y muchos deseos de tener algo más que lo que obtiene ahí. Esto deseo de buscar algo más va tomando forma con la llegada de un nuevo compañero a la escuela, venido de Escocia, del que el protagonista se hace amigo y comienzan a hacer planes para irse, lo que le cae muy mal a Mr. Monty (Palmintieri), padre de nuestro protagonista, el cual desea que su hijo viva siempre con ellos. Poco a poco la violencia del entorno orillará a Dito a irse, a pesar del daño que esto pueda hacerle a su familia. Años después recibirá una llamada de su madre, diciéndole que su padre está muy enfermo, y es por ello que decide regresar, luego de 15 años de haber partido.


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La premisa no es mala. Una historia de crecimiento, escape y posterior enfrentamiento de aquello a lo que le huiste. El asunto es que está mal contada y principalmente la sentí como un trabajo de absoluta egolatría en donde seguramente Dito Montiel fue muy feliz mientras la veía y le decía a las personas “miren mis problemas, miren qué difícil fue mi infancia y lo que me ha pasado en la vida. Vaya que mis memorias son dignas de conocerse”. Pues no. La cinta está mal hecha, la mayoría de sus secuencias son absolutamente innecesarias y la fotografía, al querer ser “realista” pierde mucha definición y carácter, habiendo inclusive secuencias tan mal fotografiadas que se pierde lo que está pasando en pantalla. Y créanme que esto no es intencional, se nota principalmente en la secuencia cuando Mr. Montiel enfrenta a su hijo luego de que éste presenció el asesinato de uno de sus amigos. A duras penas se alcanzan a ver los rostros de los personajes. ¿Un ejemplo de buena fotografía que busca ser realista y lo logra? Tarde de Perros (A Dog Day Afternoon, Sydney Lumet).

En general los actores principales hacen su trabajo decorosamente, entre los secundarios hay muchos personajes que no tienen para qué estar en la película, que no sirven para nada… Tenemos secuencias absolutamente innecesarias y que rayan en lo pedante, como un diálogo en el que el director decide eliminar las imágenes de la pantalla y poner los diálogos escritos tal y como vienen en el guión, para que el espectador los lea en lugar de ver imágenes. ¿Y esto de qué me sirve? O a la mitad de la película, cuando decide que todos los personajes van a pararse frente a la cámara a decir quiénes son y algo de su personalidad. Para eso existe el guión, y si no se es capaz de construir a los personajes y que sus acciones hablen por ellos, pues tenemos un lío grave. (Hola. Soy Laurie y todos en este barrio están enamorados de mí. Corte. Hola, soy Anthony y soy de tal foma).

La cinta me pareció decepcionante, pedante y no puedo recomendarla. Lo único que se mantiene en pie son las actuaciones, pero todos los intérpretes tienen cintas mucho más recomendables en su haber.

* (de 4)

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