Recomendaciones de un Garrafón

TED es el acrónimo de Technology, Entertainment, Design. Como dicen los videos de las conferencias, cada año mil personas se reúnen en California para compartir algo invaluable: sus ideas.

Tecnología, entretenimiento y diseño. Algo simple y a la vez no tanto. Investigadores del MIT y otras instituciones educativas, diseñadores industriales y gráficos, artistas del origami, músicos, poetas, entre otros, presentan a sus audiencias grandes ideas y nuevas formas de percibir el mundo.

El sitio, las conferencias, la información, todo está en inglés. Pero si alguien quisiera un motivo más para aprender inglés (o practicar sus capacidades de comprensión auditiva), sería ver y escuchar todo lo dicho en la página de TED. En sólo dos días de ver videos de las conferencias han brotado más preguntas y perspectivas que en el último par de meses (con todo y que el nacimiento de mi hija ha revolucionado mi mente en los siete meses recientes).

¿Cómo se vincula el origami, el viejo arte de doblar papel para hacer figurillas, con telescopios astronómicos? ¿Cómo una obra de teatro puede empoderar a las mujeres, o a una sola, a una heroína, para salvar miles de vidas? ¿Es cierta esa teoría que elaboraba, junto con mi hermano, de que los japoneses quieren hacer un mapa real del mundo con todas las fotografías que toman (aunque no sean los japoneses, sino Microsoft, lo cual lo hace más peligroso)? ¿Qué tiene que ver la salsa de tomate con el reconocimiento de la diversidad y, en última instancia, la búsqueda del disfrute y la felicidad? ¿De verdad es posible que el mundo sea un mundo mejor a pesar de la pobreza y la contaminación, o que un científico pueda sobrevivir a un acto circense para dejar un mensaje inspirador?

Mi sugerencia es que vean las conferencias de TED y le cuenten a todo el mundo que las vieron. No es spam, es simplemente la intención del sitio: conocer ideas nuevas, parir conocimiento y discusiones, como lo dice su slogan: ideas que vale la pena difundir.